Viñeta de Kalvellido
Dicen que aún nos queda el amor para combatir el ayuno y el frío.
Que con él, es posible el abrazo y la ternura. Los sueños y
las estrellas.
Pero ¿quién se atreve a hablar de amor a los parias?, ¿quién
sostiene este discurso de yugo y resignación mientras caen los cuerpos abatidos
por el hambre y el desprecio?
¿Acaso esos que tienen tiempo para amarse en sus descansos,
los que tienen la osadía de vivir de espaldas?, ¿los que mastican el presente
de nuestros hijos en harapos?
No nos quedará el amor si no lo calzamos y nutrimos.Si no lo acompañamos de una dignidad fulgurante e invencible.
Si no lo transformamos en multitud rebelde.
Pasará de largo si dejamos que nos masacren estos días de sinrazón, podridos de incertidumbre, supurando felonías.
No nos quedará ni eso, ni una pizca de amor para mirarnos si entre tanta muerte repartida no alzamos su nombre poderoso para desafiar las injusticias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario