Naufragamos en un océano de información donde la mentira es
lo que mantiene a flote cada palabra, cada imagen, cada declaración.
Mentiras disparadas a bocajarro contra la población que se
posiciona en uno u otro lado, ignorando que la verdad quedó allá donde nació el
interés de dominar las fronteras y las riquezas.
Centramos la atención allá donde nos dicen: hambrunas
esporádicas, guerras puntuales, mares de refugiados que desaparecen, salva
patrias democráticos que de pronto se convierten en tiranos, terroristas
esparcidos por todos los continentes, catástrofes climáticas, prostituciones varias,
corrupciones globalizadas y vamos fijando la mirada y la opinión según nos
mandan.
Pero detrás de todo esto queda un mundo cada vez más a la
deriva, un mundo donde unos pocos depredan los recursos y la vida.
Es la guerra.
Y no hay victorias. La muerte siempre es un fracaso.
Observar la realidad es quizá la peor manera de adentrarse
en el pesimismo.
Encontrar la verdad limpia de sangre es cada día más
difícil.
………
Siria hoy pelea por no ser otra muesca en el revólver de los
imperios.
Nos quieren justificando el horror que han patrocinado allí.
Nos quieren señalando a los refugiados como si fueran alimañas.
Nos quieren clamando por el tutelaje de los más salvajes que
manejan la economía a su antojo y esquilman las vidas.
Nos quieren presos del mismo miedo que fabrican.
Por todo esto desde aquí, desde este pequeño país en el que
vivo, miro el mundo y me pregunto ¿podremos mañana, cuando tengamos toda la
verdad sobre la mesa, cuando se detallen minuciosamente las cifras de muertos,
de mutilados, de desperdigados, de traumatizados, de encarcelados, podremos insisto,
aceptar que todo eso fue posible porque nuestra obscena credulidad nos
convirtió en impasibles?
Repetir la mentira, esa es la consigna.
Después inventarán otro enemigo que aceptaremos como si
fuera también nuestro y la historia se repetirá hasta el fin de los tiempos.
Gracias por las verdades declaradas, por el intenso fogueo para que caiga la venda que cubre los ojos de nuestra humanidad maltrecha. Lo he compartido.
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