sábado, 25 de septiembre de 2010

EEUU

Viñeta de Kalvellido

La bestia asesina legalmente.
Convierte a los jóvenes en carne de cañón y los devuelve a sus casas envueltos en una bandera.
Fabrica ataúdes en serie y después se prepara para la guerra.
La bestia tiene esta moral negra.
Esconde su podredumbre, no la enseña.
No muestra jamás su pobreza, ni la mortalidad infantil de este país de primera, ni el descontento, ni el horror de ser ciudadano extranjero en aquella tierra.
Baja el pulgar y no se conmueve.
Pasea la libertad con cadenas.
Esta es su moral, la moral que quieren imponer a la fuerza.
La del plomo y las calaveras.
La del expolio y la miseria.
La del silencio y la obediencia.
Allí sacan brillo a leyes letales.
Allí buscan verdugos y los encuentran por unas cuantas monedas.
Allí, en aquel país que sueña con ser el dueño de la vida entera, matan dentro y fuera de sus fronteras.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Apesta

Viñeta de Kalvellido

Toda la mierda del gobierno español está visible. Apesta desde hace décadas. Nunca limpiaron los desagües y como consecuencia de esto perdieron el olfato.
Llevan el mal olor impregnado hasta en las corbatas.
Fueron haciendo lo que les dio la gana; borrón y cuenta nueva, guerra sucia, desfalcos, ilegalización de partidos, cierre de medios de comunicación, tortura tras tortura, prohibiciones a destajo, precarización de los empleos, empobrecimiento, endeudamiento de la población, sabotajes a la paz, fascismo edulcorado.
Y todo esto lo han auspiciado los inquilinos del parlamento, todos, unos, claramente por haber convertido la patria, la de ellos, en un lugar yermo de democracia, otros, claramente, por su silencio, por su alevosía, por su mala baba, por sus discursos engañosos, por tirar la piedra y esconder la mano, por guardarse las espaldas esperando recuentos venideros.
Ahora los desagües reventaron, no hay excusas que maquillen sus crímenes reiterados, no hay como disimular la cifra de personas en el paro, no hay como hacer callar a la paz que llama a las puertas extranjeras, no hay cómo justificar la entrega a manos llenas de riqueza a banqueros y empresarios, no hay como barrer la pobreza de las calles. De todo esto son responsables los políticos trileros, ellos deben asumir el colapso de este país lleno de paisitos pegados con represión.
Ahora toca echarlos pa fuera.
Ya es hora de poner orden, de empezar de cero, de limpiar la casa, de orear la decencia.
Ya es hora de dejarlos en pelotas, sin poder y sin dinero.
A por ellos.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Tortura

Viñeta de Kalvellido

Las denuncias por tortura son una rutina siniestra en esta democracia secuestrada por políticos vacìos, banqueros y empresarios.
No entraré en detalles, no diré cómo quedan esos cuerpos después de los interrogatorios, no explicaré qué son los electrodos, ni la picana, ni la bolsa.
No hablaré de los rostros deformados, del insomnio, del hambre, del terror.
No explicaré cómo son las secuelas que estas torturas dejan.
No diré nada de las violaciones, de los objetos que utilizan.
No diré que es habitual, corriente, común, que el periodo de incomunicación se convierta en días eternos donde el detenido sufre la violencia permanente de funcionarios pagados con impunidad.
No, no entraré en detalles.

Pero cada vez que alguien es detenido sé que ya en el furgón empiezan las ostias, la cabeza entre las piernas, los golpes en la nuca. Sé que serán desnudados, humillados, reventados los testículos, pellizcados los pezones, insultados, amenazados, obligados a decir lo que no son, lo que no hicieron.
Y ahí están los que las niegan, sabiendo que son ciertas.
Ahí están las Audiencias, haciendo oídos sordos a los gritos, al espanto, a las marcas visibles e invisibles que les muestran.
Ahí está su cinismo, su mala baba, su disimulo, su juego sucio.
Ahí está el crimen de los màs justos.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Los chacales


Viñeta de Kalvellido

El sábado los chacales se pusieron nerviosos.
Esperaban clavar sus colmillos. Un movimiento en falso, un tropezón cualquiera, una palabra y a la pelea.
Pero se quedaron solos, sin carnaza sobre la mesa, sin disculpas para la guerra, con la paz silenciosa afrentando su violencia.
Volvieron a sus cuevas con el rabo entre las piernas.
Y un pueblo inmenso, sereno, un pueblo que sabe muy bien lo que está haciendo se mantuvo firme en su deseo.
Anduvieron sueltos en Bilbao, tenían hambre de argumentos, deseaban un grito, un insulto, un contenedor abrasado, deseaban unas calles llenas de gente a la que atacar con cualquier disculpa.
Pero los vascos supieron contener la rabia, aguantaron la respiración y miraron al frente, es mucho lo que está en juego.
Los chacales van aprendiendo que de nada van a servirles las provocaciones, de nada van a servirles las garras afiladas, las cadenas, las prohibiciones, las detenciones, la presión mediática, la mentira, la tortura.
De nada van a servirles, son zarpazos al aire porque ya está en marcha la paz. Camina pese a los que se empeñan en arrancar sus millones de piernas.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Un pueblo informado es un pueblo irredento

Viñeta de Kalvellido

Un pueblo informado es un pueblo irredento. Punto pelota.
Por eso el poder necesita controlar a los periodistas como si fueran soldados, por eso premia a muchos de ellos y los convierte en mediadores de sus falacias, en servidumbre, en soplones, en contrabandistas de letras.
La información, o mejor, la desinformación, es un narcótico eficaz que frena el instinto de rebelarse, lo pisotea llenándolo de contenidos vacíos de realidad.
En nuestros pesebres abundan palabras masticadas, elaboradas en laboratorios propagandísticos para que nos alimentemos de ellas y las digiramos dándolas por ciertas.
Porque un pueblo desinformado es un pueblo manipulado.
Un pueblo esclavo.
La desinformación es otra más de las estrategias de la bestia para convertirnos en gente que no se queja, en gente razonablemente contenta que se conforma con la miseria que le dejan.
Son millones los ejemplos.
Guerras con excusas inventadas, atentados diseñados por los amos y atribuidos a sus enemigos, masacres silenciadas, mentiras sobre armamentos, mentiras sobre personas subversivas, mentiras electorales, golpes de estado, hambrunas, enfermedades y así un largo etcétera donde el periodista, o más bien, el cronista del poder, utiliza su profesión para servir en bandeja la cabeza cortada de la humanidad.
Por eso es tan importante proteger a todo aquel que se dedica honradamente a este oficio, a todo aquel que se arriesga a dar información veraz, a todo aquel que ayuda con su palabra a desenmascarar a los que se amparan en la política para hacer del mundo una inmensa propiedad privada.
Por eso digo, es vital mantenerse firme en el desprecio hacia estos escribidores al dictado, es vital escuchar la verdad limpia de bala y paja.
Es vital escuchar esa verdad y hacer oídos sordos a los que tapan con sus embustes el crimen organizado de los estados.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

¿què tiene de malo la tregua?

Viñeta de Kalvellido

¿Qué tienen algunas palabras que ponen en guardia al poder?
Deberíamos estar contentos por la declaración de la tregua.
Pero deberíamos estar contentos todos, no unos pocos, todos.
Sin embargo, hay una parte que tiembla.
Tiembla porque la propuesta es poner palabras sobre la mesa.
Es decir, tienen miedo a escuchar.
Es decir, tienen miedo a dejar hablar.
Tienen miedo a guardar silencio, igual silencio que el de ETA.
Porque hasta ahora, durante décadas, sólo ha hablado la violencia de todas partes, de todos los lados, de todas las formas.
¿Por qué?
¿Por qué no es una buena noticia la tregua?
¿Por qué les perjudica?
¿Qué temen perder?
¿Qué temen reconocer?
¿No sería la paz el estado idóneo?,
¿No es la paz algo deseado por todos?
¿El problema está en que la paz del poder es una, grande y libre?
¿El problema está en que la paz del poder es una paz a medias?
¿Se puede hablar de paz con las cárceles llenas de gente que solo piensa y sueña?
¿Se puede hablar de una paz tuerta?
¿Se puede hablar de paz, sencillamente?
¿Por qué el poder sospecha de esta palabra cuando es otro quien la lleva?
¿Por qué la condena a la mudez?
¿Qué tienen estas tres letras sencillas?
¿Qué tiene de malo la paz?
¿Qué tiene de malo hablar?
¿Es que la palabra mata?
¿Es que la paz mata?
¿Es que matan las ideas?
Digan, entonces, ¿qué tiene de malo la tregua?

domingo, 5 de septiembre de 2010

Europa tiene peste

Viñeta de Kalvellido

Europa tiene peste, la peste fascista.
Europa cierra filas, se pone en guardia, levanta muros, cerca con más alambradas, tienen miedo, no es lo que era, ya nadie cree en ella, naufraga, las ratas muerden lo que sea.
Y tiene miedo de la deformidad que ella misma sacò de entre sus piernas.
Tiene miedo de los que vinieron de fuera trayendo a rastras su miseria, de los que se instalaron en medio de su obscena riqueza y arañan día a día la mirada de quien observa.
Ha llegado a Europa de nuevo la peste blanca a invadirlo todo con sus ideas. Ya no le basta con poner sus manos sarmentosas sobre los domicilios más pobres, no le alcanza con destruir a golpe de leyes y de propaganda las porciones pequeñas de libertad que en estos últimos años había dejado sueltas.
No le alcanza, se desafilan las tijeras que recortan vida y recortan salud y recortan trabajo y educación y cultura y solidaridad y justicia. Ahora, esas tijeras apestadas se clavan en los de fuera, en las vísceras de los niños que no juegan, en las arterias de los hombres que no trabajan, en la yugular de las mujeres que levantan hogares con frìo y nieve, cartones, e hijos sin escuela.
Ahora extiende sus brazos para golpear a todo aquel que puede juntarse y reclamar pan y tierra.
Europa está harapienta y es a los harapos a quien golpea.
Ha llegado la peste más blanca de su historia, la peor peste, la que más mata.
La que engorda a sus ratas, la que les da el voto, la palabra y afila sus colmillos para que muerdan.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Maldita poesìa pura

Viñeta de Kalvellido

No entiendo la poesía que calla,
no entiendo sus versos limpios,
sus palabras despiojadas.
No entiendo la poesía sin conciencia.
No entiendo esa poesía inmaculada sin muertos sobre la mesa, sin cicatrices,
no entiendo la poesía que no cuenta la sangre derramada,
que no escucha millones de lamentos en cadena.
No entiendo la poesía que teme asomarse a la tierra.
No entiendo la poesía de camisa limpia,
de amor a secas,
de paz en tiempos de guerra.
No entiendo la poesía que ha perdido el habla
mientras fuera, aquí mismo,
corren descalzos hombres y mujeres,
mientras fuera, aquí mismo,
gritan en medio de tinieblas,
mientras fuera, aquí mismo,
se cansan los labios, se rompen las vertebras.
Mientras fuera, aquí mismo,
la justicia es arrastrada entre cadáveres,
mientras fuera, aquí mismo,
los nombres pesan,
el tiro es fácil,
los cràneos se afeitan.
No entiendo, no.
No entiendo la poesía de espejismos,
de andares suaves y buenos modales.
Maldita poesía pura
que no afila sus palabras,
que no las mancha.
Maldita poesía
hecha con bostezos en serie,
que nunca vive a la intemperie.

Maldita poesía que insiste con su voz tibia
en mostrarnos un mundo
donde nada es amargo,
donde siempre es domingo,
donde todo es fecundo.
Maldita esta poesía
sin llagas y sin pulso.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Minotauros y droga

Viñeta de Kalvellido

He visto caer minotauros convertidos en sólo piel y algunos huesos.
Llamo minotauros a estos seres casi mitológicos que dieron lo mejor de sí mismos por un mundo mejor. Gente que fue en un tiempo combativa, que trabajó por la creación de un lugar más habitable.
Digo que los he visto caer convertidos en sólo piel sólo huesos, porque así fue. Encontraron el paraíso en el lugar equivocado. Seducidos por la droga que los transportó ágilmente, pagaron el peaje con su lucha, con sus ideas, al fin pagaron con su propia vida.
Y creo que hay un componente personal en esto, pero también creo que la droga es una más de las armas que utiliza el poder para convertir en vigilia todos los sueños de rebeldía.
No es nuevo esto que digo, no es nuevo el letargo en el que se hunden los pueblos que son invadidos con sustancias de todo tipo.
No es nuevo afirmar que el negocio de la droga lo atesoran los mismos que idean las masacres, los mismos que empujan al mundo hacia la barbarie. Y me importa un carajo lo que piensen ahora mismo los beatificadores de su consumo, los argumentadores de sus bondades, los que seguramente me tacharán de reaccionaria, los que prontamente exhibirán su retahíla de que el problema no está en la sustancia, si no en la persona que abusa, que la cuestión es hacer un uso racional de ella, que la farmacopea es droga, o que se ha usado durante toda la historia para abrir la mente y nuevas percepciones etc.

Reflexionando sobre estos tiempos que nos toca vivir, sobre el aquí y ahora, sobre los zarpazos que da la bestia pienso que es urgente mantener las ideas limpias, es urgente no escuchar los cantos de sirena que esas dosis de sueños nos ofrecen amablemente en cada esquina, en cada bar, en cada conversación.
Es urgente, hablemos del aquí y del ahora, de esta realidad turbulenta, de esta agresión permanente al ser humano, de esta violencia que nos atraviesa el costado, hablemos de la necesidad de decir basta a tanta impunidad, hablemos de los paraísos que queremos edificar hombro con hombro, no de los que están edificados ya y se compran y se venden fácilmente.
Hablemos de la soledad del ser humano, de su condena a la tristeza, de esas porciones de alegría que lo secuestran y lo encadenan.
Hablemos de la urgente necesidad de mantener la rebeldía más lúcida que nunca, hablemos de ser libres de toda atadura ficticia, de todo mundo paralelo y estúpidamente risueño.
Si alguien ha visto caer minotauros como yo he visto, sin duda alguna sabrá por qué digo que cualquier idea subversiva “colocada” se convierte simplemente en una esclava.

Ahora molestan los gitanos

Viñeta de Kalvellido

Ahora molestan los gitanos, unas monedas en los bolsillos y los mandan pa fuera.
Y no hay más que hablar.
Se van porque lo ordena un patán, un visionario tuerto, un estúpido.
Se van porque no tienen pan, porque se ponen enfermos, porque vinieron pobres y la pobreza es su única compañera, se van porque no tienen techo, porque tienen muchos hijos, porque no encuentran trabajo.
Se van porque porque a la hora del recuento, ellos no cuentan.
Se van primero los gitanos, después tocará el turno a los mendigos, después suma y sigue.
Se van porque quieren barrer las calles de la miseria que su propia ideología crea.
Y estos criminales nos recuerdan un pasado, de Führer, de Duce, de Generalísimo: todo lo que irrita no se debe quedar en el país como sementera.
Y así cada día que pasa estos personajes histéricos, descerebrados, sostienen las mismas ideas de entonces pero camufladas entre leyes y propaganda y màs mierda.
Y así cada día que pasa los parias aumentan y aumentan también los sucios argumentos de quienes los atacan.
Y así caminamos de espaldas hasta ese tiempo no tan remoto donde el fascismo llevaba al paredón a todo aquel que estorbaba.