ARTICULOS ANTIGUOS DE SILVIA DELGADO

domingo, 29 de noviembre de 2020

Maradona o las diosas



Maradona murió y con su muerte hemos leído opiniones de todo tipo. Apasionadas casi todas ellas.

La verdad es que yo no admiraba a este tipo, ni siquiera me hacía gracia verlo frotándose la mejilla en el pecho del comandante y no lo sentí nunca como uno de los míos por el simple hecho de haberse tatuado la imagen del Che en su hombro.

Pero las reacciones a su muerte me han hecho preguntarme ciertas cosas. Por ejemplo, ¿alguien puede decirme de alguna mujer futbolista que despierte las mismas pasiones que Maradona?,

¿Alguien puede darme el nombre de una mujer, deportista de élite acusada de maltrato a su pareja?

¿Alguna mujer profesional de cualquier deporte ha sido pillada “graciosamente” pagando a tocateja por relaciones sexuales con adultos o con menores?

De haber sido así, es decir, que una tenista, una jugadora de baloncesto, una futbolista, una boxeadora hubiera sido borracha y pendenciera, hubiera visitado prostíbulos por doquier o hubiera soltado mamporros a diestro y siniestro a quienes compartían su almohada ¿estaríamos hablando de ella como “una diosa humanizada?

Resumiendo, Maradona parece el dios de los Hombres, por eso lo defiende a capa y espada el pueblo hambreado y también el pueblo ilustrado. Lo defienden porque esas “sombras” que le perdonan, esos “deslices” sin importancia, esas gracietas de niño consentido que regresa a los arrabales son el espejo de todos los machos alfa. De izquierda y de derecha. De este o de cualquier continente.

Si hubiera sido mujer, Maradona hoy no tendría quien la defienda, ni quien la llore. Ni siquiera nosotras, las mujeres feministas la lloraríamos. No podríamos ocultar sus delitos con eufemismos.