lunes, 28 de abril de 2014

La palabra

Viñeta de Kalvellido

Siempre he sentido fascinación por la palabra.
Me maravillan las personas que saben usarla, en voz alta, por escrito o en paredes.
La palabra puede muscular las ideas más atrofiadas, puede poner en pie de paz o de guerra.
La palabra, cuando está en manos de los libres tiene más poder que mil AK47.
Por eso es temida, odiada, encarcelada. Porque cuando  da en el blanco revienta las cadenas, airea los corazones, se pone a cantar  a las mujeres y los hombres hasta que se hace luz entre las tinieblas.
La palabra no es piedra, pero golpea, no es plomo, pero dispara, no es propiedad privada.
Es de todos o de ninguno.
Pero los que la quieren en sus jaulas, la persiguen, la acechan, la quieren atar en corto, herirla de muerte, llenar de miedo sus arterias.
Hoy hubo cacería, el objetivo es claro, hacer que seamos más cautelosos, que seamos  nuestros censores, que nos vigilemos a nosotros mismos, que no opinemos enrabietados, que pongamos a nuestras letras o a nuestra voz dentro de sus fronteras canallas.
Que callemos, de lo contrario habrá más poetas en galeras.
La palabra, hoy, cruza los dedos para que tengamos el coraje mañana de seguir disparando toda la metralla.

domingo, 27 de abril de 2014

La tristeza

Viñeta de Kalvellido

También la tristeza está en contra nuestra.
 Salpica  sal sobre las heridas
y no le importa si son niños
o viejos balbuceantes
o madres en andrajos.
Recorre las arterias y las envenena,
pudre cada instante.
Su oficio es llegar a cada casa
con todos los espejos,
mostrar la soledad, el hambre,
poner sobre las mesas desamor e impotencia,
hundir en el fango
la poca vida que nos va quedando.
La tristeza no sabe de canciones
viste de luto y de sudario.
Hoy yo le retiro mi saludo,
le clavo estas palabras
y le escupo la sangre.
porque ha venido, yo sé,
 a cerrarme los ojos
para que no vea
que otros,
muchos otros,
le cortan el paso
aunque les dispare a bocajarro
siglos de derrota y amargura.

sábado, 26 de abril de 2014

Ahora y no màs tarde

Entonces,
es el momento ahora y no más tarde
de mirar las cruces  gamadas,
de comprender que están presentes
con sus dioses y sus patrias.
Ahora y no más tarde, es el momento
de impedir su renacimiento.
Debemos verlas recogiendo
 diezmos asfixiantes
para abonar de impunidad
sus sables.
Ahora, si.
Ahora avanzan sus anhelos de holocaustos,
de muerte como estribillos
llorados por niños.
Ahora, si.
Ahora el calendario
vuelve al principio
cuando el  miedo se remendaba
con coraje
y las derrotas
eran el  pan de cada día.
Ahora, si.
Ahora y no más tarde
debemos ver que sòlo los hombres
a medio parir
las llevan escritas en sus brazos y en sus frentes.

jueves, 24 de abril de 2014

Cuando yo muera

Viñeta de Kalvellido

 No sé si la muerte dejará que el tiempo caiga sobre mis hombros cansados
o vendrá hoy a parar este corazón
que conspira contra el silencio deletreándome versos.
No sé si  me dará una tregua,
si firmará el armisticio de dejarme una rato más,
el suficiente para derramar sobre la tierra
palabras que  sean fruto.
No sé  cuándo vendrá,
si me pudrirá lentamente
o se acercará violenta para arrancarme de cuajo la vida.
No sè, no hay nada escrito,
 también morimos sin aviso.
Sólo sé que cuando yo muera
quedarán otros poetas,
miles de poetas escribiendo en las mismas tinieblas,
miles de poemas naciendo cuando yo muera,
miles de palabras pariendo primaveras.
 Yo sé que cuando muera,
no moriré del todo,
habrá en cada pueblo
otro poeta calladamente obstinado,
desnudo con su ternura,
hambriento de pan y peces.
Si quedan  poetas
sobre la tierra,
no moriré cuando muera.

miércoles, 23 de abril de 2014

Dìa del libro

Viñeta de Kalvellido

Dicen que hoy es el día de libro.
Qué cosa tan curiosa, celebrar los libros cuando se lee poco y deprisa.
Cuando la libertad del escritor se puso en cuarentena y los más célebres escriben al dictado de las monedas.
Ahora mismo lo que menos interesa es el conocimiento, que la gente aprenda, que la gente sepa. Esto puede abrir una brecha en las conciencias.
Aquí está el peligro, aquí está el arma, aquí está la destrucción.
Por eso se muestra al escritor como una divinidad, alguien con una luz mágica dispuesto siempre a besar las manos de quienes los premian, sean reyes, presidentes o princesas.
Interesa mostrar al escribidor como un ser humano claudicante, sobornable, capaz de mostrar sus villanías sin ruborizarse.
Interesa sepultar a Bergamín, o matar de viejo amoroso a Machado.
Es alabado Saramago pero a Sastre no se le nombra.
María Teresa León, no cuenta, cuenta Alberti y sus arrebatos de egolatría.
Las banderas que enarbolaron son arrancadas de sus escritos, que no se sepa que fueron comunistas, republicanos, anarquistas, seres libres al fin y al cabo.
Que no se sepa que detrás de algunos libros hubo una vida consecuente, a veces de muerte, a veces de guerrilla, a veces de cárcel, de exilio o simplemente de olvido.
Que no se sepa que el oficio de escribidor no es publicar y tener éxito, es hacer que las palabras sean voz de quien se calla, sean sueño y esperanza, sean alas, dulces alas que nos lleven hasta la verdad y sus paraísos.

En fin, yo me quedo con el coraje de mis autores favoritos, con sus textos crucificados y hago un brindis de desprecio por aquellos escribientes que se llenan los bolsillos en despachos donde les susurran qué tienen que decir, que pensar y dónde.

martes, 22 de abril de 2014

Los niños

Viñeta de Kalvellido

Me preocupan las personas que se adaptan, que son capaces de vivir con el horror diario, que pasan página y miran para otro lado.
Me preocupa que los hijos de estos despreocupados crezcan indiferentes al sufrimiento ajeno, lejos de ellos mismos, entrenados para la docilidad, acostumbrados a la escasez de preguntas o de ideas, al desconocimiento de la libertad y sobre todo me preocupa que  hagan borrón y cuenta nueva y crean que la empatía es algo que no sirve.
Creo que la colonización de la humanidad será completa el día que la infancia desconozca que hay quien llora y quien canta más allá de los muros de sus casas.
Que màs allá de su pan, en otras mesas escasea.
Es sistema es tan perverso que sabe esto, sabe que los niños serán sumisos mañana si  neutralizan pronto sus conciencias, si  les arrancan su sed de saber, de crear, de reír o de juntarse.
Necesitarán sus brazos en el futuro, sólo eso, unos brazos mansos, silenciosos, solitarios.
Por esto me preocupan los padres fríos, porque en realidad sus hijos nacieron  para ser libres aunque ellos no lo sean, aunque a ellos no les importen los andrajos, ni las rejas, ni las letras.

Y porque son tantos los que respiran ajenos al dolor que vive enfrente que pienso en sus niños y no puedo dejar de estremecerme al imaginarlos en un futuro con su corazón tristemente vacío mendigando salario y besando a quien se lo da o se lo arranca de las manos. 

lunes, 21 de abril de 2014

Poema tonto XV

Viñeta de Kalvellido

Siento que la vida mastica mis huesos para escupirlos
a los pies de quienes me dejaron huérfana
de amor y de otras prisas.
Los roe lentamente
en un silencioso ritual donde poco a poco
va cayendo la piel sobre el espanto.
Siento que la vida clava sus uñas en mi vientre
porque es ahí donde se gestan las palabras que me nacen,
porque es ahí donde la derrota de existir
se hace voz y compañía,
porque es ahí, en mi vientre fecundo
donde hablan los hombres y las mujeres a los que la rutina
les paga  tristeza y otras heridas.
Siento que la vida insiste,
con su dientes y sus uñas,
año tras año,
lluvia tras lluvia.
Pero dentro de mí
hay un aliento que perdura,
hay un poema que no calla,
hay un gentío que llora y canta.
Y por más que me muerda la vida
estaré  para escribir los poemas que ellos me dicten.

miércoles, 16 de abril de 2014

Sobre el optimismo

Viñeta de Kalvellido

En estos tiempos yo no puedo ser optimista.
Ojalá pudiera quedarme deslumbrada mirando a los que arriesgan, luchan, siguen, siguen.
Pero la usura es dueña de un ejército de miserables demócratas que disparan en la nuca y por la espalda a los pueblos.
Ya no somos útiles, nuestra mano de obra cotiza a la baja porque somos demasiados los que necesitamos algo, lo que sea, un poco de pan, un poco de sal.
Y este desamparo puerta a puerta, en la intimidad, cuando el hambre acecha y acecha la incertidumbre y la vida es un lugar donde el fantasma de la precariedad duerme los sueños hasta podrirlos, entonces es posible atar nuevas cadenas y ponernos a trabajar de rodillas, lamiendo con gratitud los mendrugos que quedan.
Es un trueque siniestro donde se intercambia tiempo por humillación.
Donde nos arrancan la vida.
Donde somos sustituibles por otros más saludables o más jóvenes o menos capaces para la libertad.
Es así.
 En un mundo donde tantos millones de personas ni tienen trabajo ni hay una mínima esperanza de conseguirlo, el mercado compra esclavos. Es el paraíso para los pervertidos
Y el infierno para los que tienen sus brazos vacíos.
La historia dice que los imperios se nutren con yugos de pan.
Està en nosotros llevarlo a cuestas o destruirlo.

domingo, 13 de abril de 2014

diosito

Viñeta de Kalvellido

Yo nunca he visto a dios,
 ni quiero.
Pero he escuchado sus cuentos llenos de miedo.
He conocido las cruces y los látigos
que ponen, en su nombre, a los pueblos.
No, no lo he visto,
no he podido conversar con él,
ni he podido pellizcar su barba blanca.
Quizá no se acerca a las poetas,
quizá prefiere dejar  evidencias sólo en  aquellos que tienen alma.
No lo he visto,
pero creo que existe allá donde la resignación pone alambradas
a la conciencia.

sábado, 12 de abril de 2014

El pàjaro

Viñeta de Kalvellido


Cuando vengas a mi casa,
verás en la puerta un pájaro.
Yo habré ido a buscar a ese cobarde que lo dejó cadáver.
Lo buscaré para dañarlo.
Entre los hombres, encontraré a ese hombre
artesano del dolor de balde,
entre los hombres encontraré a ese altruista del espanto.
Ni un grito, ni un insulto,
Ni una sola palabra de las que guardo.
Le miraré a los ojos, a ese pozo desde el que miran los que
tienen el corazón muerto
y cantaré con voz muy clara:
Hay manos con piedras y plomo
porque la libertad de los pàjaros
les de asco.

jueves, 10 de abril de 2014

Poema tonto XIV

Viñeta de Kalvellido

Si no sabes recorrer las huellas
que dejan en la memoria
los sables.
Si no sabes mirar hacia delante
llevando a rastras la infancia.
Si no sabes recomponer los pedazos que fueron quedando
de ti mismo cuando el dolor era hondo
y era hondo tu penar
y era hondo el mar de tus lágrimas centenarias.
Si no sabes cantar después de todo
o brindar a pesar de la derrota,
si a pesar de todo no aprendes
a silbar cuando te miran,
a reír cuando  la locura  desafía  esta vida de sudarios y de hambre,
a gritar cuando el silencio es la mordaza que lacera cada instante.
Si a pesar de todo no aprendes
que estamos mejor juntos,
mirándonos de frente.
Quédate entonces, aferrado a tu tristeza,
a nosotros nos espera un mañana
limpio de sal  y  de tinieblas.

miércoles, 9 de abril de 2014

Poema tonto XIII

Viñeta de Kalvellido

Què cansado es mirar el amor,
verlo desangrándose
gota a gota hasta llenar el cáliz
del tiempo que termina.
Qué cansado es vivir con esta urgencia de amar
a pesar de las míseras codicias
que fustigan el corazón para dejarlo en carne viva.
Què cansado es amar
buscando insaciable el manantial de la empatía,
pensar que otras pieles amarán con mi misma prisa,
creer que estamos cerca
para temblar al mismo ritmo
si nos duelen las alas
si nos arrancan la risa.
Qué cansado es explorar  tierras, ideas, utopías.
Si no estás a mi lado,
la urgencia de vivir
es sólo espanto.

viernes, 4 de abril de 2014

La cacerìa

Viñeta de Kalvellido

Cada día son más frecuentes las cacerías.
En universidades, en pueblos, en plazas, en fronteras, en barrios.
La orden es clara: que se callen, se ahoguen o sangren.
Que  que ni dios aúlle porque le duela el hambre.
Los burócratas del golpe salen a cazar a los acorralados, a los emputecidos, a los que tienen voz.
Huelen su sangre viva.
Su grito vivo.
Su ejemplo digno.
Las jaulas  se llenarán de humanidad.
Si no lo remediamos antes, 
fuera quedarà sòlo mansedumbre y barbarie.


jueves, 3 de abril de 2014

Aquì no pasa nada

Qué podredumbre.
Mueren en las cárceles y aquí no pasa nada.
Mueren esposados y aquí no pasa nada.
Mueren tiroteados en el mar y aquí no pasa nada.
Mueren suicidados y aquí no pasa nada.
Mueren de hambre en los comedores solidarios y aquí no pasa nada.
Mueren por balas de goma y aquí no pasa nada.
La impunidad es la médula que sostiene tanta carcoma.
Nadie paga por estos crímenes.
Nadie pagó por los crímenes del pasado.
Los verdugos se lavan las manos para volver a las andadas.
Tanta podredumbre llevamos clavada,
tantas cruces,
tanta reja,
que sólo nos queda
secarnos las lágrimas

y poner en pie toda la rabia.

miércoles, 2 de abril de 2014

Poema tonto XII

Viñeta de Kalvellido

El corazón tiene huesos.
Los sabios no lo saben, yo se lo digo.
Lo sé porque los del mío
se rompieron y no pudo moverse
hacia ningún sitio.
El corazón tiene vísceras,
 laberintos,
tiene piedras,
 semillas,
 tierra
y mares.
El corazón tiene cisnes y almendros,
tiene ceniza y frutos y volcanes,
tiene, el corazón, manantiales,
niños, pájaros, nubes.
Tiene cementerios, oasis,
amor y desamor a raudales.
El corazón desafía  a la lógica.
Trabaja a destajo por construir con sus manos el paraíso
Los sabios no lo saben, yo se lo digo.

La palabra

Viñeta de Kalvellido

La palabra no es tuya, ni mía,
todos la usamos pero no nos pertenece.
Ni a poetas ni a jueces.
Si va con sus  huesos a la cárcel,
si le ponen alambradas,
si hacen jirones con ella
o le disparan por la espalda
es porque   con su voz
fue libre.
Aterradoramente libre.
La palabra, que no es ni tuya, ni mía,
puede ser pregunta, o blasfemia
o puede ser la arteria por donde fluya la desobediencia.
La palabra dicha de cualquier modo, en cualquier parte,
en paredes,
pintada sobre arenas movedizas
escrita en los labios de quien se duele a pleno pulmón en las calles
es de todos porque no es de nadie.
Si sólo una de ellas es amenazada
nos amenazan a todos
los que llenamos con su puño y letra

 versos, ideas  o canciones.